A-Cérumen

La extracción: una técnica demostrada

De manera general, existen 2 maneras de extraer un tapón: ya sea por extracción manual o mecánica, o por lisis. Sabiendo que a menudo ambas suelen combinarse.

 
La lisis, o reblandecimiento del tapón, se practica desde hace mucho tiempo. El médico de la Antigüedad Aulo Cornelio Celso ya describía una técnica para este caso en el  siglo I de nuestra era en su obra «De Medicina». 
 
A lo largo de los siglos, numerosos ingredientes se impusieron como el aceite de oliva o de parafina, el agua oxigenada o el bicarbonato de sodio. Estos ingredientes todavía se emplean hoy en día. Más adelante llegó la medicina química, con nuevas sustancias como el docusato* sódico.
 
La extracción manual se practica quizás desde hace más tiempo mediante el curetaje. Consiste en la utilización de una cureta que permite rascar el tapón, principalmente, cuando está demasiado seco.
 
El método de irrigación vio la luz en el siglo XIX con la aparición de la especialidad de ORL. La inyección de agua caliente permite despegar el tapón pero es más eficaz si este ha sido previamente ablandado con una solución auricular adaptada.